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"Cuartel general (De nuestros corresponsales"

Item

Código de referencia

AR-BN-PIP-CLVM-PRE-lt-Nº0000

Fechas

13-08-1865

Título/Asunto

"Cuartel general (De nuestros corresponsales"

Nombre de publicación/Lugar

La Tribuna - Buenos Aires

Alcance y Contenido

Artículo publicado en La Tribuna (Buenos Aires). pág. 2, 3era columna. Fechado: 10 de agosto de 1865. Se espera un chasque del general Flores. Mensajeros de la vanguardia informan de la captura de un grupo de soldados enemigos, tres de los cuales eran mujeres disfrazadas de hombres.

Idioma

Español

Firma /Seudónimo

Falstaff (Seudónimo atribuido a Lucio V. Mansilla)

Nivel de descripción

UD Simple

Volumen y Soporte

1 ejemplar - Original

Tipología documental

Artículo

Nombre del creador

PIP Mansilla

Existencia y localización de originales

Original en poder de la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional "Mariano Moreno"

Transcripción

Silencio sobre los movimientos del general Flores. Por unos recién llegados se sabe que se le incorporaron las tropas de Paunero. Mujeres paraguayas vestidas de soldados. Críticas a las crónicas de Falstaff.
Agosto 10 de 1865.
¡Qué atroz momento el que estamos pasando!
Pintan el de Tántalo como una cosa horrible, pero yo creo que el nuestro es peor.
Todo el día de hoy lo hemos pasado en acecho de los chasques. Éstos se suceden sin interrupción.
Llegan a cada momento; pero hasta estas horas, 12.00 de la noche, no ha llegado el que esperamos con febril impaciencia, esto es, uno del general Flores.
Sin embargo, no por eso carecemos de algunas noticias cuya naturaleza es para aumentar más y más nuestra ansiedad.
Dos individuos llegados ayer de la vanguardia, se presentaron al general en jefe.
Estos declaran que el día 7 en que salieron, se había incorporado el general Paunero a la columna del general Flores.
Acto continuo tuvieron una entrevista en la que se acordó el modo y forma de caer sobre el enemigo que al parecer se halla dispuesto a pelear.
Agregaron los declarantes que ya habían tenido lugar algunas guerrillas.
En una de ellas, parece que un jefe oriental les tomó ocho prisioneros, de los que tres se convirtieron en prisioneras.
¡Eran mujeres vestidas de hombre!.
¡No hay duda que López nos quiere hacer marchar de novedad: tres mujeres para pelear!.
Un oficial brasileño que estaba con nosotros cuando oyó esto, exclamó: “¡o homen isto é o diabo: mulheres con calcaus e fardadas!” .
El aire de asombro con que nuestro simpático aliado dijo estas palabras, nos hizo descostillar de risa a los que allí estábamos.
Diré a ustedes ahora, que esta es la única vez que les transmito noticias que no tienen un carácter oficial.
Pero como no las hay oficiales, allá van las que he oído decir al Presidente.
De los lados de la Uruguayana nada sabemos.
Aunque la hora es algo avanzada, el señor Mendieta me pone en el caso de robarle algunos minutos al dios Morfeo que ya me espera.
En El Republicano de hoy que les adjunto, este señor –a quien no tengo el honor de conocer si bien hoy le veo brillar como escritor público– dirige a uno de ustedes una carta, en cuyo exordio se digna ocupar del pobre Falstaff.
¿Cuál es la causa? El haber dicho yo que en una serenata había revelado la fortaleza de sus pulmones, dando vivas entusiastas al señor general Urquiza.
Con este motivo se ha amostazado el señor Mendieta, lo que siento, pues es un hombre que promete …
El señor Mendieta dice que cuando llegue el caso él no gritará sino ¡Viva la Patria!.
El único peligro que corre es que lo tomen por aquel amigo que se llamaba ¡Viva la patria!
Basta por hoy. Quizá mañana les diga algo importante.
Falstaff
13 de agosto de 1865.

Fecha válida

1865-08-13