"Teatro de la guerra. Campamento Tuyu-Cué. (Correspondencia de La Tribuna)"
Item
Código de referencia
AR-BN-PIP-CLVM-PRE-lt-Nº000
Fechas
05-11-1867
Título/Asunto
"Teatro de la guerra. Campamento Tuyu-Cué. (Correspondencia de La Tribuna)"
Nombre de publicación/Lugar
La Tribuna - Buenos Aires
Alcance y Contenido
Artículo publicado en La Tribuna el 5 de noviembre de 1867, nro. 4128, p. 2, columna 4. Sección: “Teatro de la guerra”. Con fecha del 27 de octubre y la firma de Tourlourou (seudónimo). El estado sanitario del ejército continúa mejorando. Cañonazos cruzados durante los últimos dos días. Un paraguayo tomado como prisionero ofrece una revelación de interés: el camino que siguen las provisiones del enemigo. Con fecha del 31 de octubre, agrega que el cólera ha desaparecido casi por completo del campamento y reproduce y responde una carta de Severo Ortiz, que le recrimina el modo en que se refirió a su padre, el difunto coronel Ortiz, en entregas anteriores.
Idioma
Español
Firma /Seudónimo
Tourlourou (Seudónimo de Lucio V. Mansilla)
Nivel de descripción
UD Simple
Volumen y Soporte
1 ejemplar - Digital
Tipología documental
Artículo
Nombre del creador
PIP Mansilla
Nota de investigación
Existencia y localización de originales
Original en poder de la Hemeroteca de la Biblioteca Nacional "Mariano Moreno"
Transcripción
TEATRO DE LA GUERRA
Campamento de Tuyú Cué
Octubre 27 de 1867
(Correpondencia de La tribuna)
El estado sanitario del Ejército ha mejorado notablemente.
En Tuyú Cué que es el centro de las fuerzas brasileras han ocurrido muy pocos casos.
Entre los argentinos ninguno.
Cuatro hermanas de la caridad que llegaron el 25 a Tuyutí han recibido orden de regresar a Corrientes, hasta nueva orden, agradeciéndoles su venida.
Los dos últimos días ha tronado constantemente el cañón de la escuadra.
Ayer hacia la puesta de sol cayó una bomba en la torre del medio de la Iglesia de Humaitá, derribando la cruz y causando en todo el edificio notable daño.
Lopez no dejará de explotar este tiro, agregando a sus embustes cotidianos que somos enemigos de la santa religión del Paraguay.
He vuelto a salir con una partida volante el mayor Coronado.
Uno de los últimos prisioneros ha resuelto un problema.
Es una revelación de interés.
Ya sabemos por donde va el camino de la cesta. A por la misma orilla del río Paraguay; pero la practicabilidad depende de que el río está muy bajo. A pesar de haber hecho en él varios puentes es sumamente penoso; tiene muchos esteros pantanosos y algunos arroyos tributarios del Paraguay que hay que pasar a nado.
Es por ahí que el enemigo sigue introduciendo cuanto puede dentro de sus líneas.
Quiero decir, pues, que en cuanto ocupemos permanentemente un punto cualquiera sobre la costa del río, quedará interceptada la comunicación terrestre, no pudiendo por ahora, como está visto, la caballería enemiga competir con la nuestra.
A propósito, el enemigo ha vuelto a ocupar con sus piquetes de caballería las posiciones que ocupaba el 20 en nuestra izquierda. Es tenacidad!
Por la derecha ha mostrado cuatro regimientos, como de doscientos hombres cada uno. Avanzaron hasta cerca del terreno donde tuvo lugar el penúltimo combate. Pero a la simple aproximación de una fuerza brasilera se ocultaron el bosque. Es tenacidad!
Parece indudable que la caballería de Lopez está agotada, por falta de cabalgaduras, estando contestes todas las declaraciones en que hay muchos regimientos desmontados y sima escasez de caballos en el país; las pocas invernadas que quedan están a inmensas distancias y en un muy mal estado de gordura.
Ha llegado el Comandante Ayala con un pequeño contingente de línea y guardia nacional.
Tourlourou.
Campamento de Tuyú Cué
Octubre 27 de 1867
(Correpondencia de La tribuna)
El estado sanitario del Ejército ha mejorado notablemente.
En Tuyú Cué que es el centro de las fuerzas brasileras han ocurrido muy pocos casos.
Entre los argentinos ninguno.
Cuatro hermanas de la caridad que llegaron el 25 a Tuyutí han recibido orden de regresar a Corrientes, hasta nueva orden, agradeciéndoles su venida.
Los dos últimos días ha tronado constantemente el cañón de la escuadra.
Ayer hacia la puesta de sol cayó una bomba en la torre del medio de la Iglesia de Humaitá, derribando la cruz y causando en todo el edificio notable daño.
Lopez no dejará de explotar este tiro, agregando a sus embustes cotidianos que somos enemigos de la santa religión del Paraguay.
He vuelto a salir con una partida volante el mayor Coronado.
Uno de los últimos prisioneros ha resuelto un problema.
Es una revelación de interés.
Ya sabemos por donde va el camino de la cesta. A por la misma orilla del río Paraguay; pero la practicabilidad depende de que el río está muy bajo. A pesar de haber hecho en él varios puentes es sumamente penoso; tiene muchos esteros pantanosos y algunos arroyos tributarios del Paraguay que hay que pasar a nado.
Es por ahí que el enemigo sigue introduciendo cuanto puede dentro de sus líneas.
Quiero decir, pues, que en cuanto ocupemos permanentemente un punto cualquiera sobre la costa del río, quedará interceptada la comunicación terrestre, no pudiendo por ahora, como está visto, la caballería enemiga competir con la nuestra.
A propósito, el enemigo ha vuelto a ocupar con sus piquetes de caballería las posiciones que ocupaba el 20 en nuestra izquierda. Es tenacidad!
Por la derecha ha mostrado cuatro regimientos, como de doscientos hombres cada uno. Avanzaron hasta cerca del terreno donde tuvo lugar el penúltimo combate. Pero a la simple aproximación de una fuerza brasilera se ocultaron el bosque. Es tenacidad!
Parece indudable que la caballería de Lopez está agotada, por falta de cabalgaduras, estando contestes todas las declaraciones en que hay muchos regimientos desmontados y sima escasez de caballos en el país; las pocas invernadas que quedan están a inmensas distancias y en un muy mal estado de gordura.
Ha llegado el Comandante Ayala con un pequeño contingente de línea y guardia nacional.
Tourlourou.
Fecha válida
1867-11-05